Víctor Hugo decía que “la utopía del hoy es la realidad del mañana”. Lo que ayer no parecía posible, hoy es una realidad. Eso es lo que paso ayer con el triunfo conseguido por el Real Madrid ante el Manchester City
Alcanzar objetivos utópicos sorprende a la mayoría porque es hacer posible lo aparentemente imposible. Una manera eficiente de alcanzar resultados utópicos es creando Equipos Inteligentes. Porque los Equipos Inteligentes alcanzan resultados utópicos.
Los Equipos Inteligentes convierten lo utópico en realidad. Además, los Equipos Inteligentes consiguen resultados utópicos de una manera consistente a lo largo del tiempo, porque crean una estructura intangible de unidad que es lo que les da la consistencia en la consecución de resultados extraordinarios.
Esa estructura intangible de unidad trasciende a la individualidad de los miembros que lo componen; y por eso los resultados que alcanzan son utópicos.
Experimento a menudo esta emoción de sorpresa cuando observo Equipos Inteligentes trabajando en los contextos empresariales. La capacidad de la unidad sorprende a los individuos, incluso a los que forman parte del equipo y a sus lideres, porque se escapa a la previsibilidad de la racionalidad individual.
El verdadero éxito del Real Madrid, más allá de los éxitos deportivos, es el haber creado esa estructura intangible de unidad que le posibilita alcanzar de una manera consistente resultados utópicos.
Construir Equipos Inteligentes está al alcance de casi todas las organizaciones. Pero no lo hacen porque prefieren satisfacer las demandas de ambición de los miembros que los componen y mantener los resultados satisfactorios del hoy, que ser sorprendidos por resultados extraordinarios mañana.